Cada vez las ciudades, los hoteles, los itinerarios y el turismo en general, es más accesible para todos aquellos que viven con una discapacidad. Desde hace años este sector se ha puesto las pilas para que la movilidad reducida no sea un hándicap para aquellos que quieren hacer una excursión o pasar sus vacaciones como el resto de las demás personas.
En algunas ciudades se trabaja cada vez más para que sean totalmente accesibles para discapacitados. Museos adaptados para invidentes, hoteles sin barreras o playas accesibles son algunas de las medidas que se han llevado a cabo para que el turismo esté al alcance de todos los públicos.
La naturaleza también se está adaptando a las necesidades de las personas con movilidad reducida. A tal efecto se han desarrollado varias rutas senderistas que se pueden hacer en sillas de ruedas o que pueden seguir, bajo la supervisión de un guía, los discapacitados visuales.
A continuación, te proponemos algunas de ellas:
Ruta de la Jara (Toledo)
Una de las rutas senderistas más más espectaculares adaptadas para discapacitados es la ruta de la Jara, en la provincia de Toledo, que se adentra desde las riberas del Tajo hasta la Sierra de Altamira. En su trayectoria atraviesa túneles, viaductos y estaciones de tren abandonadas.
El itinerario completo es de cincuenta kilómetros y hay un tramo de 20 totalmente adaptado tanto para sillas de ruedas como los handbikes.
Ruta por la vía verde del Oso (Asturias)
Otro de los itinerarios recomendados para personas con movilidad reducida es la ruta por la vía verde del Oso, una de las más antiguas de España.
En este itinerario, que invita a un viaje por la esencia de la Asturias más natural, se puede disfrutar de túneles excavados en la roca, desfiladeros agrestes y bellos paisajes. Es un camino totalmente adaptado para sillas de ruedas salvo limitaciones puntuales.
Ruta por el Valle de Linza (Huesca)
Por otra parte, la excursión al oscense Valle de Linza es otro de los itinerarios que pueden hacer las personas en silla de ruedas. En este sendero, que comienza en una zona de pastos y acaba en un bosque de hayas, también destaca por presentar zonas de descanso con mesas adaptadas.
Vía Verde del Carrilet (Girona)
Asimismo, en la provincia de Girona encontramos varias rutas senderistas adaptadas a las personas con movilidad reducida que no solo atraviesan bellos parajes sino que recorren cascos urbanos totalmente acondicionados para este tipo de turista. Uno de estos itinerarios es la excursión por la Vía Verde del Carrilet I que transcurre entre Olot y Girona. A lo largo de los 50 kilómetros de ruta se ven parajes de gran importancia ecológica aparte de algunos monumentos como el castillo de Hostels o los pequeños pueblos de Anglès y Sant Feliu de Pallerols.
Ruta Jurásica de Préjano (La Rioja)
En La Rioja también hay varios caminos totalmente adaptados como la ruta jurásica de Préjano, una extensión de cinco kilómetros de la vía verde de Cidacos que también destaca por su alto valor paisajístico e histórico. Comienza en Arnedillo y acaba en el núcleo urbano de Préjano.
Las personas con movilidad reducida o con cualquier tipo de discapacidad que se acerquen a La Rioja próximamente, no pueden perder la oportunidad de acercarse a Vivanco donde podrán visitar el “Mejor Museo de Vino del Mundo” (premiado por la OMT-ONU) y su Bodega, calificada como una de las mejores según la revista Wine&Spirits en 2015.
En Vivanco, ofrecen la posibilidad de realizar un turismo accesible a todos los niveles, ya que cualquier persona podrá disfrutar de todos sus recovecos sin problema alguno.
Por si lo no sabías, todas las instalaciones de Vivanco están adaptadas a personas con movilidad reducida, deficiencias visuales, etc. Cuentan, por ejemplo, con rampas de acceso con silla de ruedas, diferentes texturas en el suelo para facilitar la ruta a las personas invidentes y las indicaciones de las obras albergadas en el Museo de la Cultura del Vino, se pueden encontrar escritas en alfabeto Braille. Y es que en el año 2014, Vivanco y ONCE firmaron un convenio para la adaptabilidad del Museo a invidentes, ampliando nuevos acuerdos años después con otros organismos como PREDIF, desarrollo de turismo accesible, y ASPRODEMA, promoviendo el empleo entre personas con discapacidad.
En definitiva, “Cultura De Vino accesible para todos”.