Las tierras de La Rioja son, por su orografía, ideales para hacer senderismo. Aunque son muchas las rutas que se pueden realizar, en este artículo destacaremos tres vías verdes (habilitadas para el acceso de personas con discapacidad) que conectan varios puntos de la Comunidad Autónoma.
Se tratan de la vía verde del Oja, que une Ezcaray con Casalarreina; la vía verde del Cidacos que conecta Calahorra con Arnedillo; y la vía verde de Préjano, entre Arnedillo y Préjano.
Las vías verdes son, por definición, senderos que se utilizan para ir a pie o en bicicleta y por donde no está permitida la entrada de vehículos motorizados. Habitualmente siguen recorridos paralelos a ríos y casi siempre por antiguos trazados para ferrocarril que hoy día están en desuso.
¿Preparados para conocerlas?
1. VÍA VERDE DEL OJA: de Ezcaray a Casalarreina
Esta senda recorre un antiguo camino de ferrocarril de 28 kilómetros dividido a su vez en dos etapas: de Casalarreina a Santo Domingo de la Calzada y de Santo Domingo de la Calzada a Ezcaray. Esta vía verde sigue la antigua línea de ferrocarril proyectada a finales del siglo XIX y que se clausuró por falta de uso en el año 1964. La primera etapa, de casi 15 kilómetros, recorre una amplia llanura con un paisaje agrícola ocupado por cultivos de cereal y de regadío. Bajo su superficie se encuentra el denominado acuífero del Oja que abastece los campos de la zona. El camino es rectilíneo y bien definido y el tiempo de recorrido es, aproximadamente, de 3 horas y media. El segundo tramo de la vía verde, que conecta Santo Domingo de la Calzada y Ezcaray es una zona de transición entre la llanura del río Oja y el pie de la Sierra de la Demanda, caracterizado por un paisaje más forestal. La distancia que se ha salvar es de 13,5 kilómetros y recorre uno de los límites del espacio de la Red Natura 2000 “Sierras de Demanda, Urbión, Cebollera y Cameros”.
2. VÍA VERDE DEL CIDACOS: de Calahorra a Arnedillo
Al igual que la vía verde del Oja, la del Cidacos está vinculada a una antigua línea de ferrocarril de vía estrecha que se construyó en los años veinte del siglo pasado para dar salida a los productos mineros, industriales y agrícolas del valle. En el año 1966 fue clausurada y treinta años más tarde se recuperó como vía verde. Este camino se realiza en dos etapas, la que une Calahorra con Arnedo y la que conecta Arnedo con Arnedillo. La primera, de casi 21 kilómetros, recorre la zona de huertas del río Cidacos mientras que el segundo tramo, de 14 kilómetros, tiene un paisaje más agreste ya que pasa por abruptos relieves de las Peñas de Arnedillo y por los cortados fluviales de Santa Eulalia.
3. VÍA VERDE DE PRÉJANO: de Arnedillo a Préjano
Por último, la vía verde Préjano es una ruta corta (4,6 kilómetros aproximadamente) considerada una “hija” de la vía verde del Cidacos que discurre sobre un antiguo ferrocarril minero, ramal del que iba desde Calahorra a Arnedillo. Por este sendero se puede descubrir el espectacular panorama de los almendros en primavera en el valle y los paisajes escarpados de la sierra. Como curiosidad, la vía verde de Préjano permite hacer un viaje en el tiempo ya que aquí se pueden observar icnitas, huellas fosilizadas de dinosaurios.
Muy cerca de estos parajes contamos con Vivanco, con sus viñedos, bodega, museo… Junto con las vías verdes, hará de nuestra escapada un plan de lo más completo. ¿Te apuntas?
Bodegas Vivanco en Briones, La Rioja
Imágenes de La Vía Verde del Oja. Autor: La Rioja Turismo
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