Nacido en los años setenta del siglo XX, como práctica transgresora y vanguardista, el arte urbano es hoy en día una de las formas creativas más exitosas y más difundidas a nivel global. Desde que figuras icónicas como TAKI 183, Rammellzee, Jean-Michel Basquiat, Keith Haring o Futura2000, entre muchos otros, empezaron a pintar sus tags y grafitis ilegales sobre los vagones del metro y otras superficies de los espacios públicos de Nueva York ya ha corrido mucha agua bajo el puente.
A pesar de su historia relativamente breve, el street art ya forma parte a pleno título de los lenguajes artísticos contemporáneos. Su importancia dentro del sistema del arte actual está fuera de discusión, siendo plenamente aceptado tanto por la historia del arte como por el público, la crítica, las instituciones y, por supuesto, el mercado. A propósito de su enorme éxito comercial, cabe recordar que Basquiat es en este momento la gran estrella del mercado del arte secundario internacional. Su cuadro Untitled (1982), que en 2017 se adjudicó en Sotheby’s de Nueva York por casi 111 millones de dólares, es la séptima obra de arte más cara de la historia vendida en una subasta pública, la obra más cara de un artista estadounidense y la obra más cara creada después de 1980. Otros artistas, como Banksy, Obey Giant, Kaws, Os Gêmeos o JR (pertenecientes a la generación posterior a la de Basquiat y Haring), tienen hoy una popularidad estrepitosa y son auténticas “máquinas comerciales”. Asimismo, artistas españoles como Suso33, Okuda, Sfhir, Spok Brillor o Belin (por mencionar sólo algunos), están teniendo una proyección internacional de primer nivel.
La gran difusión del street art se debe principalmente a su absoluta libertad expresiva, su gran impacto emocional y su capacidad de conectar directamente con la vida de las personas, estando muchas obras ubicadas en espacios abiertos y bien visibles incluso desde muy lejos.
Al igual que otros creadores del pasado, también varios artistas urbanos han tratado en alguna ocasión temas relacionados con el vino y su cultura. Si en artículos anteriores hablamos, por ejemplo, de la relación entre el arte y el universo enológico en obras de Tàpies, Picasso, Warhol, Mucha o Genovés, entre otros, esta vez presentamos una selección de piezas destacadas de artistas urbanos, españoles e internacionales, que han abordado el mismo tema.
Sfhir
Empezamos por uno de los más reconocidos protagonistas de la “escena urbana” española, Sfhir. Pseudónimo de Hugo Lomas, este artista nació en Madrid y dio sus primeros pasos en el grafiti. En 1995, con catorce años, fue expulsado del instituto por ser descubierto pintando con spray. Cuenta la leyenda que tras este suceso, su profesor de arte le impuso una sanción muy poco habitual: tuvo que repetir la obra clandestina, esta vez en el muro del instituto y con la autorización de su director. Este evento le cambió la vida y le orientó hacia su brillante trayectoria artística.
En sus obras, Sfhir combina el grafiti con todo tipo de medios, como aerógrafos, pistolas, pinceles, rodillos, bolígrafos, fuego sobre madera o ilustraciones efímeras realizadas con punteros láser. En varias ocasiones Sfhir ha colaborado con Vivanco. Entre otras iniciativas, cabe destacar su participación en 2015, en la inauguración de la exposición “Inspirados por el vino. Maestros del grabado contemporáneo”, en la que se expusieron obras pertenecientes al Fondo de Grabados del Museo Vivanco de la Cultura del Vino. Durante la inauguración, Sfhir realizó la performance Lumen, pintando con linternas y láser, sobre una superficie impresa con pintura fotoluminiscente, fascinantes trazos de luz.
A propósito de esta colaboración, el artista comentó: «El vino, al igual que el arte, forma parte de nuestra cultura. Nuestro país tiene el ángulo de incidencia de la luz del sol más apropiado para percibir los colores y, por tanto, para crear arte, y ese maravilloso sol es el mismo que hace que nuestro vino sea el mejor del mundo». En este vídeo se puede ver el artista en acción durante el evento mencionado:
Globartia Visual Art Company
Seguimos con el trabajo de Globartia Visual Art Company, un grupo de artistas riojanos que se dedicada a la creación visual, realizando proyectos como murales artísticos, talleres y diseño. Este grupo también ha colaborado varias veces con la Fundación Vivanco. Aquí enseñamos tres obras murales pintadas en las localidades de Haro y Briones para celebrar el vino y su estrecha vinculación con ese territorio.
La primera es una reproducción del cuadro Costumbres jarreras, del pintor riojano Enrique Paternina (1866-1910). Fue realizada en 2013, sobre una de las fachadas de la Plaza de la Paz, en el municipio de Haro.
Las otras dos piezas fueron realizadas, en 2012, en Briones; un pueblo marcado en esencia por el mundo del vino. La primera reproduce, a modo de trampantojo, un botellero en escala monumental sobre la fachada de un edificio. La segunda celebra Briones y su relación con la Cultura del Vino, a través del elemento simbólico del cáliz sagrado. En la parte inferior de la composición, casi como si fuera una isla en un mar de vino, aparece el Museo Vivanco.
Mr. Trazo
Hablando de murales que celebran el vino y su milenaria cultura, no podemos dejar de destacar otra obra maravillosa realizada, en 2016, por otro protagonista del arte urbano español, Mr. Trazo. Se titula “Sabia locura”, mide 2,50 x 4,00 metros y se encuentra en el municipio de Villacañas, al sureste de la provincia de Toledo. Con estas palabras describe le artista su obra: «Oculto tras una máscara de Baco se encuentra el Caballero de la Triste Figura, un viejo considerado loco e inmaduro por osar convertirse en hidalgo y adentrarse en el mundo de sus sueños. Don Quijote hereda algunas características de su arquetipo de la mitología clásica, Sileno, para a continuación mimetizarse con Baco, de quien toma su sabia locura y nos enseña que soñar no nos convierte en chalados».
Nacido en Brazatortas (Ciudad Real) en 1987 y actualmente afincado en Cuenca, Mr. Trazo empezó su trayectoria artística en la calle, pintando grafiti. Obras suyas se pueden ver hoy en muros de ciudades como Madrid, Barcelona, Ibiza, Wiesbaden, Lisboa, Londres, Miami o México DF, entre otras. Su estilo pictórico ha sido definido como expresionista y uno de sus elementos típicos es la deformación de las figuras, para representar, en sus palabras, “la cara oculta de cada individuo”. Junto con Sfhir, forma parte de la lista de los 20 mejores artista urbanos españoles elaborada por el experto escocés Laurent Jacquet, autor de la web especializada “Street Art 360”.
Mr. Trazo, Sabia locura, 2016. ©Mario Rodríguez. Foto: cortesía Mr. Trazo, 2018.
Faith47 y Ben Eine
Terminamos nuestro recorrido artístico-callejero en Sudáfrica. Aquí, en 2010, dos de los artista internacionales más importantes, Faith47 y Ben Eine, fueron invitados a participar en el proyecto The Origin Wine Canvas. Se trata de una intervención monumental que los artistas realizaron pintando sobre varios depósitos de vino, con una capacidad de unos 120.000 litros cada uno, de la bodega Origin Wine de Stellenbosch (cinco fueron intervenidos por Ben Eine y dos por Faith47).
The Origin Wine Canvas, Fath47. Cortesía: Next Decade Discipline, 2018.
Nacida en Ciudad del Cabo, en 1979, y afincada en Los Angeles, Faith47 es una de las artistas urbanas más famosas del mundo. De formación autodidacta, empezó a pintar grafiti en la segunda mitad de los años noventa. Obras suyas se pueden ver en Estados Unidos, Canadá, Sudáfrica, China, Nueva Zelanda, Australia, Alemania o Suecia, entre otros países. En 2013 trabajó también en España, donde realizó una obra en Tudela y una en Málaga. Para The Origin Wine Canvas realizó una pintura en blanco en negro, que combina dos figuras femeninas alegóricas con una inscripción poética, según su habitual estilo ligado a la emoción y la espiritualidad. En este vídeo se puede ver la artista realizando la obra:
The Origin Wine canvas, Ben Eine. Cortesía: Next Decade Discipline, 2018.
Artista inglés, Ben Eine (pseudónimo de Ben Flynn) nació en Londres en 1970 y es mundialmente conocido por sus inconfundibles experimentaciones gráficas con las letras del alfabeto. Ha colaborado con artistas como Banksy, D*Face o Inkie (entre otros) y obras suyas se encuentran en las calles de Londres, París, Estocolmo y Nueva York, entre otras muchas ciudades. En julio de 2010 alcanzó la fama global, cuando el entonces Primer Ministro británico David Cameron regaló una obra suya – Twenty First Century City – a Barack Obama. Para The Origin Wine Canvas realizó una pieza en la que el texto escrito juega con las variaciones cromáticas. En este vídeo le vemos en acción creando su extraordinaria pieza: