Hay muchas formas de sentir el vino y en Vivanco, con nuestras actividades de enoturismo, hemos intentado juntarlas todas. El vino como esencia vitícola, embriagador, pleno y sabroso. El vino con la perspectiva que nos da la historia, misterioso y eterno. El vino leído, contado y soñado. El vino como turismo enológico. Pero había algo más. Todo lo que sucede alrededor del vino. Su parte vital, su día a día. Su propuesta divertida, emocionante y sensorial. Todo lo que hacemos con el vino con el único propósito de interactuar con él y dar rienda a nuestros sentidos. El vino como estilo de vida, así es como lo entendemos. Eso son las Experiencias Vivanco; el sonido de una copa en un curso de cata, el aroma del vino oculto en la oscuridad de una visita a la bodega, la sorpresa de un plato en nuestro restaurante. El viaje misterioso a través de la cultura del vino en un recorrido por el Museo. El vino tocado, sentido y vivido. Todo esto y mucho más es lo que te ofrecemos en 9.000 m2 de instantes únicos. Una forma diferente, exclusiva e inolvidable de enamorarte del vino y que te invitamos a compartir. ¿Te apetece?
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